Amar con sangre argentina


Jamas ella ha creido que un demente podia amar, amar sanamente desde el corazon y así fue como amando he dejado de insistirte y así seguira ella creyendolo.
Pero aca esta el demente, solo, verdaderamente solitario, escribiendo, uniendo palabras para volver a insistir, en silencio, y así decirte “te amo”, AH! Si lo saben las nubes que te amo eternamente, desde el momento en que mire tus ojos por mas de dos segundos y ahí encontre ¡que universo! ¡que facil es maravillarse! Y hablo de tus ojos sirena, que aun conservo – a duras – la forma en que me veian tus ojos.
¿sabes? duelen estas espinas, espinas que jamas haran desangrar a este corazon y ¿sabes por que? Porque ese recuerdo de tu forma de mirar, de tus ojos me irrigan de sangre, sangre argentina de tanta mezcla, tanta mezcla que me vuelvo eskizofrenico para amarte en mil mundos.
Y si, en uno solo no estas, no me amas, pero yo te amo, pero es uno solo, un mundo en millones no dañaran a mi corazon, por eso puedo seguir amandote porque tengo millones de tu en todos mis mundos, menos en uno.
¿Qué mundo valdra mas? En uno creo muchos, pero en otros te tengo, no existe la balanza que equilibre todo lo que es el amor. Amor que jamas he podido equilibrar, no hay cosa que pese más en mi alma, si por amor se mueve mi corazon, si por amor se irriga mi sangre argentina, de mezclas de mezclas de amores para ti.
Por eso todavía puedo seguir amandote aunque no estes, porque solo en un mundo no estas.
Te amo.

Fin.